jueves, 11 de febrero de 2010

tema tabú

Salvo una, todas las mujeres que participaron de la conversación en cuestión estuvieron de acuerdo: el sexo no es lo que era. Y no es lo que era por varias razones, que se expusieron en aquella charla y paso a detallar, por supuesto omitiendo cualquier dato que pueda desnudar la identidad de las mujeres que fueron parte de aquel sincericidio...

1. Las pechugas te hacen acordar a cualquier cosa menos a un sinónimo de éxtasis. Están caídas, flacuchientas y no te parece que puedan calentar a nadie, así que mejor que ni te las toquen.
2. Estás agotada. Si trabajaste fuera de la casa porque trabajaste fuera de la casa. Y si te quedaste con los cabros porque te quedaste con los cabros. Como sea, no hay quórum.
3. No te sientes sexy. No porque no lo seas, sino simplemente porque los partos te han dejado la cagada y aunque él se encargue de decirte que te ves espléndida, sabes que sólo quiere media hora de sexo ardiente.
4. Cuando finalmente decides que OK y, porque después de todo sabes que una vez que empiezas te encanta, sólo puedes pensar en si alguno de los niñitos aparecerá por la puerta porque tiene miedo del cuco, justo cuando tú estás viendo estrellas.
5. Crees que a esta altura hay otras formas de hacer el amor. Menos carnales y más cómodas, por cierto.
6. Cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia.
7. Yo no opino. Observo. Aclaro para que mi papá, mi hermano y mi abuelito no se pongan colorados.

Como dije, en aquella charla hubo una única mujer que opinó diferente. Sólo una, que por momentos despertó la envidia de todas. Al borde de los cuarenta, cambia las sábanas cada tres días. Cuando el trabajo de ambos lo permite se van de la ciudad a algún hotel decente para descansar de los cabros chicos. Y al menos una vez a la semana intentan posiciones nuevas (ahí ya todas dejaron de sentir envidia, es que les dio lata la idea de innovar). En fin, mal que les pese a los maridos, pololos, amantes y demás etiquetas masculinas, muchas mujeres creen que podrían vivir en abstinencia. O como dijo una: “¿Nosotros? Y, una vez por semana... pero semanas de 10 o 12 días”.

Conclusiones:
· No se rían. No es gracioso (sobre todo para el huevón que tienen al lado), pero al menos es tranquilizador saber que no son las únicas locas que han perdido el ritmo.
· Mal de muchas, consuelo de tontas.
· No insistan, no daré ni un nombre. Jamás.
· Dicen las que han pasado por esto y lo han superado que se trata de algo pasajero. Como dice el refrán, dura lo que dura dura.

3 comentarios:

  1. Y yo que pensé que era la única jajajaja

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  2. hay menos mal que encontre este blog..mientras mas leo mas me rio(es que nunca pense que hubiera otras personas que pensaran y sientieran igual..jejeje)...me siento realmente aliviada..

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  3. mis semanas son de 15 a 20 dias jajajajajajajaja

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